GENERAL MOTORS CESA SUS OPERACIONES EN VENEZUELA

No podía ser de otra manera.  La reacción de la corporación General Motors, tras el embargo ilegal de su planta el martes por la tarde, no podía ser sino anunciar el inmediato cierre de sus operaciones industriales en Venezuela.
Por lo pronto, ayer tarde General Motors Venezolana entregó un comunicado que informa de la decisión y arroja luces sobre lo que viene en lo inmediato: cese inmediato de sus operaciones en el país, la liquidación a la totalidad de los trabajadores de acuerdo a la regulación laboral venezolana y la garantía de servicio y repuestos para el parque Chevrolet circulando en el país.
En un comunicado ayer tarde la empresa se dirigió a su personal y a la opinión pública:
“Fundada en 1948, General Motors Venezolana (GMV), la ensambladora de mayor tradición y antigüedad en el país, líder del mercado por más de 35 años consecutivos,  se ve forzada a cesar sus operaciones en Venezuela como consecuencia de un embargo judicial totalmente ilegal.
El día de ayer (martes), la planta de la empresa fue sorpresivamente tomada por las autoridades públicas, quienes asumieron el control de la misma, impidiendo el desarrollo de las actividades.  Adicionalmente, otros activos de la empresa, como vehículos, fueron sustraídos ilegalmente de sus instalaciones.
El embargo fue dictado en total desconocimiento al derecho a la defensa y al debido proceso, causando un daño irreparable a la compañía, a sus 2.678 trabajadores, a sus 79 concesionarios que representan la red de servicio más grande del país con más de 3.900 trabajadores y, a sus proveedores que representan más del 55% de la industria de autopartes en Venezuela.
Por lo anterior, General Motors Venezolana anuncia el cese inmediato de sus operaciones en el país, y asegura (en la medida que las autoridades lo permitan) el total cumplimiento de las obligaciones legales asociadas a la finalización de la relación laboral con sus trabajadores, debido a causa ajena a la voluntad de las partes.
GMV rechaza contundentemente esta arbitraria medida (el embargo amplio) y ejercerá vigorosamente todas las acciones legales dentro y fuera de Venezuela en contra de la misma.
La Compañía confía en que en el tiempo prevalecerá la justicia y regresará para continuar liderando el mercado venezolano.  Mientras tanto, GMV a través de sus concesionarios continuará brindando servicios de posventa y repuestos para todos sus clientes”.
Como informamos ayer, el martes por la tarde sorpresivamente la planta de GMV en la Zona Industrial de Valencia, la más importante ensambladora de la Región Andina, fue tomada por la fuerza pública por un dictamen del Juzgado Tercero de Primera Instancia en lo Civil, Mercantil y del Tránsito de la Circunscripción Judicial del Estado Zulia.  La polémica decisión judicial está relacionada con el caso de un concesionario al que GMV no le renovó el contrato de distribución en el año 2000… ¡hace 17 años! 
En su momento el expediente del concesionario Centro Mercantil en el Zulia estuvo bajo observación por el cúmulo de manipulaciones para presionar en extremo a General Motors Venezolana, incluyendo medidas extremas contra varios de sus principales directivos.  Repetimos: fue hace 17 años…
Pero ahora, y lo dejamos a la imaginación de nuestros lectores conocedores de la actual realidad política y judicial venezolana, se decidió un embargo amplio por un total de 476 millardos de bolívares en activos…
En su primer comunicado, el martes, tras la ocupación de la planta, General Motors Venezolana enfatizó en que “el embargo es improcedente, absurdo, fuera de la lógica jurídica y del debido proceso”.  Y agregó  que “está tomando todas las medidas legales a su alcance”.
Ayer tarde la empresa comunicó su cese inmediato de operaciones, la liquidación de todo su personal (2.678 trabajadores) y rechazó contundentemente la arbitraria medida del embargo amplio, afirmando que “ejercerá vigorosamente todas las acciones legales dentro y fuera de Venezuela en contra de la misma”.

Es oportuno recordar que en los últimos años, por diversas causas, han cesado sus operaciones industriales en Venezuela importantes automotrices, entre ellas Fiat, Renault, Honda, Hyundai, Mitsubishi y Fuso.  Y sus plantas privadas que ensamblan vehículos de las marcas Ford, Jeep, Dodge, Toyota, Iveco y Mack están paralizadas porque el régimen no honra una deuda superior a los 3.700 millones de dólares con las ensambladoras y autopartistas y les impide las divisas para la importación de material productivo y repuestos.

Comentarios

"Su sociedad está condenada", Ayn Rand

"Cuando advierta que para producir usted necesita obtener autorización de quienes no producen nada; cuando compruebe que el dinero fluye hacia quienes trafican no bienes, sino favores; cuando perciba que muchos se hacen ricos por el soborno y por influencias más que por el trabajo, y que las leyes no lo protegen contra ellos, sino, por el contrario son ellos los que están protegidos contra usted; cuando repare que la corrupción es recompensada y la honradez se convierte en un autosacrificio, entonces usted podrá afirmar, sin temor a equivocarse, que su sociedad esta condenada"

Ayn Rand, 1950. Rand (1905-1982). Filósofa Ruso-Estadounidense