Las medidas de racionamiento aplicadas por los expendios de alimentos, así como la asignación de un cupo semanal para comprar en las redes públicas, no han alejado a los consumidores de los establecimientos.
Al contrario, persisten las colas para entrar a los supermercados que tienen uno o varios de los productos que escasean, y las colas para pagar siguen siendo excesivamente largas.
En Bicentenario Terrazas del Ávila había –en horas del mediodía– poca cola para entrar, pero una vez adentro la fila ocupaba varios pasillos y el área que va desde la charcutería hasta las verduras. Hasta la cola de los empleados era larga.
“Tengo dos horas acá”, dijo una señora a la que aún le quedaba un buen trecho para llegar a caja. “Mi esposo y yo nos turnamos; uno busca las cosas y el otro cuida el puesto en la cola”, agregó. En el localvolaron la leche en polvo, el aceite vegetal y la harina de maíz; pero tenían papel higiénico, pasta regulada, café baratón, pollo y margarina.
En Unicasa El Marqués se pagaba relativamente rápido, pero en la parte de atrás los clientes hacían una cola para la carne de segunda y otra para llevar pollo. Además, en el establecimiento tenían arroz, compotas, juguitos y leche larga duración.
Al mercado de Guaicaipuro llegaron temprano la harina precocida y el aceite de maíz; en varios puestos se armó tremenda cola para llevar un combo que contenía 2 kilos de harina y medio litro de aceite de maíz por Bs 25.
Guachafita con los precios. El café molido tiene ahora como tres precios. El regulado, Bs 23,33 el medio kilo, que solo se consigue en la red gubernamental; el acordado en las mesas de negociación, Bs 97,50, que se observa en municipales y toda la red privada, y el recién molido, que oscila entre Bs 120 y Bs 135 el paquete de medio kilo.
Igual ocurre con el azúcar, que en la red gubernamental está a Bs 6,11 el kilo; pero en los otros canales a Bs 18.
DESPACHO CHUCUTO
Los despachos de carne a los municipales a través del convenio con frigoríficos se quedan cortos.
En Quinta Crespo cada puesto recibe máximo dos reses semanales, mientras “antes se vendía una diaria”. Se quejan porque dicen que no pueden subsistir solo con la venta de los combos, que contienen 1 kilo de primera, 3 de segunda y 1 de tercera por Bs 130. En Guaicaipuro solo reciben carne jueves y viernes, que “alcanza para trabajar el fin de semana”.
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