LOS PAÍSES CONSTRUYEN SU PROSPERIDAD ES TRABAJANDO: CONSECOMERCIO

Los países que han logrado estándares de desarrollo productivo y de bienestar particular y familiar en el mundo, lo han alcanzado a base de trabajo, de mucho trabajo, y es por eso por lo que sorprende que Venezuela, que es en estos meses cuando, según cifras oficiales, comienza a salir de su prolongada recesión económica de los años anteriores, se permita disfrutar de un día de asueto el venidero 4 de julio del año en curso, según decisión gubernamental.

Para el Consejo Nacional del Comercio y los Servicios (CONSECOMERCIO), que se pronunció en similares términos a los actuales en el 2010, cuando también se adoptó una medida similar durante la Semana Santa para, supuestamente, ahorrar energía eléctrica, la nueva medida convierte la semana venidera en una jornada laborable de sólo tres días, ante el feriado del 5 de julio, y contradice la necesidad en la que está la Nación de incrementar su esfuerzo productivo, en vista de sus deficiencias económicas y sociales.

Además de que se produce en víspera del ya oficial “día libre”, sin permitírsele a las empresas que producen y despachan bienes, a cumplir con sus horarios de producción, de entrega de mercancía, abastecer las líneas de distribución y comercialización; a las familias cubrir sus necesidades de bienes; a los centros de enseñanza a cumplir con las exigencias propias de fin de año escolar, por sólo enumerar algunos casos en día “normal” de trabajo.

CONSECOMERCIO recordó que, recientemente, los consumidores se vieron afectados por la ausencia de diversos productos nacionales e importados en los anaqueles del comercio formal. Y, en parte, eso obedeció a los impedimentos impuestos por despachos oficiales al libre funcionamiento que requieren la producción, el transporte y el comercio, para atender la demanda de los consumidores.

Y casos como el de este asueto forzoso, parte de un extenso “fin de semana de cuatro días”, pudiera influir en la repetición de situaciones similares a las comentadas.

Acciones intempestivas de este tipo, al final, generan efectos adversos en los consumidores, en las empresas y en la economía venezolana, en general, precisó el gremio empresarial del Comercio y los Servicios.