Venezuela comenzará de nuevo a buscar socios extranjeros para activar el proyecto de gas natural costa afuera Mariscal Sucre, en medio de una crisis eléctrica que ha hecho del hidrocarburo un asunto urgente, dijeron a Reuters fuentes del Gobierno y firmas interesadas.Concebido en la década de 1980, el proyecto fue licitado el año pasado sin éxito debido a la falta de claridad en las condiciones, particularmente en el precio del gas.
"Es muy poco probable que se organice una nueva oferta pública. El método que luce más apropiado es la negociación individual con las empresas que han mostrado interés", dijo a Reuters una fuente gubernamental que pidió no ser identificada.
Ante la fuerte sequía que ha puesto en jaque el suministro de luz en el país petrolero, el Gobierno del presidente Hugo Chávez ha lanzado un programa de racionamiento y ahorro obligatorio mientras instala plantas térmicas para reducir la alta dependencia de las represas hidroeléctricas.
Tanto Mariscal Sucre como los otros dos proyectos que han avanzado en fase exploratoria requieren acelerar el ritmo de trabajo para comenzar la etapa de explotación, lo que permitiría a Pdvsa surtir a las nuevas plantas con gas y ahorrarse miles de millones de dólares en diesel.
Fuentes cercanas al proyecto confirmaron que algunas empresas tienen interés real en asociarse con Pdvsa para desarrollar las reservas de Mariscal Sucre, estimadas en más de 14 billones de pies cúbicos (BPC), y el cual podría producir 600 millones de pies cúbicos diarios (mmpcd) de gas en una primera etapa.
Luego de que en el 2007 fracasaran años de negociaciones con la angloholandesa Shell, la estadounidense Exxon Mobil, la japonesa Mitsubishi y la brasilera Petrobras, Pdvsa anunció que invertiría 8.350 millones de dólares para desarrollar el proyecto en solitario y comenzar producción en el 2008.
Sin embargo, volvió a tratar de licitarla en el 2009, aunque quedó desierta por las decepcionantes ofertas.
Las japonesas Marubeni, Mitsui, Mitsubishi e Itochu; la argelina Sonatrach, Korea Gas, Petronas de Malasia, Statoilhydro de Noruega, la portuguesa Galp, Gazprom de Rusia, la italiana Eni y Repsol de España acudieron a esa convocatoria.
Venezuela cerró este año la primera licitación petrolera desde que el presidente Hugo Chávez llegó al poder en 1999 y está a punto de culminar una ronda de negociaciones que le permitió asignar en forma directa varias áreas del bloque de crudo pesado Junín, en la Faja del Orinoco, a empresas de China Rusia, Bielorrusia, Vietnam, Japón e Italia.
También se espera un plan de desarrollo para el pozo Perla, en el Golfo de Venezuela, cuyas reservas de 6BCP explotará con Repsol y le permitirá incrementar el suministro de gas al mercado interno.
Mientras, Plataforma Deltana debió comenzar a producir el año pasado según el cronograma original pero la estadounidense Chevron, que opera dos de los tres bloques asignados para explorar, sigue esperando a que el Gobierno inicie la etapa de desarrollo del proyecto.
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