Sin duda alguna, el alza que han registrado los precios del petróleo durante los últimos días, crean expectativas sobre la posibilidad de que la economía venezolana registre condiciones en el 2018 menos complicadas que las del 2017.
Pero esos mejores ingresos, por sí solos, a decir del analista y consultor empresarial Tomás Socías López, no lo harán todo, ni ayudarán a generar óptimos resultados, si se les desvincula de otros hechos internos.
A esos ingresos superiores, dijo, hay que “añadirles voluntad política” en favor de la producción nacional, “aligerar decisiones en materia cambiaria y de precios”, como a “no desatender lo social” por las repercusiones inflacionarias.
Si se intensifica lo que se ha estado haciendo en estos días en respuesta a tales necesidades, como es el nombramiento de Wilmar Castro Soteldo como Viceministro de Economía, el cumplimiento de pagos de obligaciones internacionales desde el sector petrolero, la definición de precios transitorios de rubros esenciales, además de un eventual acuerdo en materia de refinación petrolera con China y Rusia, “sin duda alguna, se avanza por una vía esperanzadora”, añadió Socías López.
No obstante -y a esto hay que prestarle atención prioritaria- al esfuerzo de hoy se le debe “acompañar de decisiones que no pueden seguirse difiriendo”, insistió el también consejero permanente del comercio y los servicios y de la industria de alimentos. Se trata de atacar las causas de la inflación, disciplinar el gasto público y, por supuesto, garantizar que se velará por la disponibilidad de insumos, materias primas y bienes de capital para que la industria y el comercio y los servicios puedan enfrentar su descapitalización, y atender obligaciones salariales.
El analista y consultor empresarial Tomás Socías López alertó que “la atención social no puede estar ausente del cuadro descrito”. Los jubilados, los pensionados y los trabajadores formales disponen de una “respuesta en materia de ingresos seguros”. Pero existe un “contingente ciudadano considerable que está al margen de esa posibilidad “, y que debe ser atendido en sus necesidades “de manera directa, organizada y eficiente”.
Tan importante y necesario es hoy no descuidar la situación de lo social, insistió, como “evitar que el clima político y el lenguaje que se usa en su desenvolvimiento, siga erosionando la confianza que se requiere para que la economía avance positivamente”.
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