El presidente Rafael Correa anunció que Ecuador será miembro de la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA), una iniciativa del mandatario Hugo Chávez.Correa confirmó el ingreso de Ecuador a ese bloque según un despacho de la oficina de prensa de la presidencia, que recogió declaraciones del mandatario en una entrevista a la radio La Voz del Cenepa, en Gualaquiza, al sureste del país, reseñó AP.
El anuncio tiene lugar días después de que Chávez dijera que el mandatario ecuatoriano le comunicó durante una conversación telefónica que Ecuador se unirá formalmente al ALBA el 24 de junio, en la cumbre de los países miembros en la localidad venezolana de Carabobo.
Correa defendió la integración al grupo regional en el que dijo "hay grandes beneficios'', según el despacho de prensa de la presidencia.
Entre las ventajas de ser parte del ALBA, Correa mencionó "tener una posición en común ante organismos internacionales que han perjudicado muchísimo a América Latina'' como por ejemplo, el Banco Mundial y el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI), organismo de arbitraje con sede en Washington, adscrito al Banco Mundial.
Ecuador también se beneficiará del Fondo Común de Inversiones y del Sistema Unico de Compensación Regional (SUCRE), una suerte de moneda virtual que los países del ALBA y otros aliados planean usar para operaciones comerciales, señaló Correa.
"Hay que superar esa visión integracionista reducida solo al comercio para apoyarnos mutuamente, tener proyectos de energía mutuos para mejorar el comercio desarrollo y no el comercio neoliberal en base a la competencia'', afirmó.
Añadió que "mientras a más instancias de integración regional podamos inscribirnos, mejor, siempre y cuando se reviertan en beneficio del país''.
El ALBA, proyecto impulsado por Venezuela, fue lanzada como una iniciativa para contrarrestar al Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA) impulsada por Estados Unidos.
Los miembros del ALBA son Venezuela, Bolivia, Cuba, Nicaragua, Honduras, Dominica y ahora Ecuador. Paraguay y San Vicente y las Granadinas actúan como países "observadores'', calidad con la que participaban los ecuatorianos.
Los gobiernos de Ecuador y Venezuela, que buscan implantar el "socialismo del siglo XXI'' en sus países, mantienen una intensa cooperación en proyectos petroleros, incluida la construcción de una gran refinería en la costa ecuatoriana.
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