Estados Unidos quiere expandir sus lazos comerciales con Latinoamérica y espera que Brasil ayude a cerrar la Ronda de Doha ofreciendo un mayor recorte en los aranceles de bienes industriales, dijo el secretario de Comercio, Gary Locke."Esperamos realmente desarrollar una agenda comercial agresiva, abrir los mercados no sólo en Estados Unidos, sino un comercio de doble vía, porque eso será clave para la prosperidad económica de todo el hemisferio", dijo Locke en el Foro de Inversión de Reuters sobre América Latina.
El funcionario dijo que la economía global estaría dejando atrás la crisis financiera que hizo que los flujos comerciales se desplomaran en la región y en todo el mundo, reportó Reuters.
"Pienso que claramente vamos a seguir sintiendo los efectos de la crisis financiera sobre el comercio", dijo.
Pero "estamos comenzando a ver que las cosas están saliendo del fondo", agregó.
Estados Unidos es uno de los principales destinos de las exportaciones de muchos países latinoamericanos.
Pero en los dos primeros meses del 2009, las importaciones estadounidenses de productos venezolanos cayeron un 50 por ciento en valor, mientras que las compras de artículos colombianos acumulan una baja del 33 por ciento y las de mexicanos y brasileños del 28 por ciento frente al mismo período del 2008.
El plan de estímulo económico de Estados Unidos debería impulsar la demanda en los próximos meses, pero llevará mucho tiempo para que el crecimiento se restaure en forma completa, dijo Locke.
Mientras tanto, Locke dijo que los países deben resistir el proteccionismo, aunque reconoció que algunos ven los rescates que hizo Estados Unidos de su sistema financiero y automotor como proteccionismo.
Acuerdos laterales
El presidente estadounidense, Barack Obama, tuvo "grandes" encuentros con los líderes latinoamericanos el mes pasado en la cumbre de las Américas en Trinidad y Tobago y está comprometido con la aprobación de los tratados comerciales negociados con Colombia y Panamá, dijo Locke.
Pero la clave para que el Congreso ratifique esos pactos será negociar una serie de "acuerdos laterales" donde se aborden otros temas aún pendientes de resolución, señaló.
El Gobierno de Obama busca que Colombia intensifique sus esfuerzos para reducir los asesinatos de sindicalistas y juzgar a los responsables de esos crímenes.
En el caso de Panamá, la Casa Blanca quiere que el país centroamericano reforme sus leyes impositivas y haga más para proteger el derecho de los trabajadores a organizarse y realizar huelgas.
"La clave es presentar referencias para medir avances en muchas de las cuestiones que se han discutido", dijo Locke, que reveló que espera viajar a Chile en septiembre para un encuentro empresarial y ser anfitrión de unas conversaciones con autoridades y empresarios brasileños a fines de junio o julio.
Brasil
En la Ronda de Doha, Washington quiere que Brasil y otros países en desarrollo, como China e India, mejoren las ofertas de apertura de sus mercados a los bienes extranjeros.
"Lo que importa para nosotros en Estados Unidos es que haya reducciones verdaderas en los aranceles y las barreras. El tema es si Brasil abrirá sus mercados a otros países desarrollados y en desarrollo", dijo Locke.
Una prioridad clave para Brasil en la Ronda de Doha es que Estados Unidos efectúe recortes profundos en sus subsidios agrícolas y que baje las barreras que limitan las importaciones de bienes que produce la región, como azúcar, algodón, jugo de naranja y etanol.
Cada negociación requiere de concesiones difíciles, por lo que "siempre creí que se tiene que mirar cualquier acuerdo en su totalidad y no simplemente sector por sector", afirmó Locke.
"Latinoamérica produce muchos productos agrícolas que los estadounidense disfrutan y quieren. Y por supuesto Estados Unidos ofrece mucha experiencia en tecnología, energía, energías limpias que son muy necesitadas en los países en desarrollo de Latinoamérica", sostuvo.
Locke reconoció que el arancel estadounidense sobre el etanol había causado fricciones con Brasil, un gran productor de ese combustible, e indicó que la política de Washington sobre el tema podría ser revisada.
"Como la gente está comenzando a entender, necesitamos realmente mirar y evaluar el impacto completo de cómo producimos etanol y si consume o no más energía, o cuáles son las implicaciones con respecto al precio de los alimentos, o si hay otras maneras de producir etanol que consuman menos energía", dijo Locke.
En la Ronda de Doha, Washington quiere que Brasil y otros países en desarrollo, como China e India, mejoren las ofertas de apertura de sus mercados a los bienes extranjeros.
"Lo que importa para nosotros en Estados Unidos es que haya reducciones verdaderas en los aranceles y las barreras. El tema es si Brasil abrirá sus mercados a otros países desarrollados y en desarrollo", dijo Locke.
Una prioridad clave para Brasil en la Ronda de Doha es que Estados Unidos efectúe recortes profundos en sus subsidios agrícolas y que baje las barreras que limitan las importaciones de bienes que produce la región, como azúcar, algodón, jugo de naranja y etanol.
Cada negociación requiere de concesiones difíciles, por lo que "siempre creí que se tiene que mirar cualquier acuerdo en su totalidad y no simplemente sector por sector", afirmó Locke.
"Latinoamérica produce muchos productos agrícolas que los estadounidense disfrutan y quieren. Y por supuesto Estados Unidos ofrece mucha experiencia en tecnología, energía, energías limpias que son muy necesitadas en los países en desarrollo de Latinoamérica", sostuvo.
Locke reconoció que el arancel estadounidense sobre el etanol había causado fricciones con Brasil, un gran productor de ese combustible, e indicó que la política de Washington sobre el tema podría ser revisada.
"Como la gente está comenzando a entender, necesitamos realmente mirar y evaluar el impacto completo de cómo producimos etanol y si consume o no más energía, o cuáles son las implicaciones con respecto al precio de los alimentos, o si hay otras maneras de producir etanol que consuman menos energía", dijo Locke.
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